Una persona disciplinada se comporta con pulcritud y puntual, con respeto absoluto por el tiempo y espacio de las personas que le rodean. Suele llevar a cabo sus proyectos hasta concluirlos y no acostumbra dejar a la mitad sus asuntos.
Se levanta de la cama desde temprano, esto gracias a que se duerme no más allá de las 10 de la noche, por lo cual tiene una actitud dinámica gracias a un sueño apacible y reparador. Las actitudes y cualidades de una persona disciplinada bien pueden ser las siguientes.
"Tiene los pies bien puestos en la tierra. Sabe que cualquier error por mínimo que sea significa pérdida de tiempo y dinero, y que además de él se aprende…"
Actitudes y generalidades de una persona con disciplina:
- Tiene los pies bien puestos en la tierra.
- Sabe que cualquier error por mínimo que sea significa pérdida de tiempo y dinero, y que además de él se aprende.
- Cuando habla de un proyecto es porque tiene una idea clara de lo que está hablando.
- Es una persona con una formación humanística.
- Usa los adelantos tecnológicos en su provecho, siempre dentro del marco de la legalidad.
- Mantiene comunicación con sus subordinados de manera directa, clara y concisa.
- Es independiente desde una edad temprana.
- Aprendió desde la más tierna infancia el valor real de las cosas.
- Procura llevar por escrito las novedades de su trabajo sin que nadie se lo pida.
- Se compromete en el trabajo de manera casi religiosa.
- Lee mucho, escribe más, habla poco y hace mucho.
- Su óptica del trabajo es de una bendición no un castigo.
- Es buen administrador del dinero, aun con poco es capaz de hacer mucho.
- Da una impresión juvenil gracias a que no tiene vicios que afecten su salud, por lo cual siempre tendrá una apariencia lozana.
Ventajas de ser disciplinado:
- Nunca le faltara el trabajo
- Su disciplina, compromiso y competitividad son su carta de recomendación.