Construir tu propio proyecto de vida implica ciertas actitudes.
La perseverancia, la paciencia, el optimismo, le responsabilidad, por mencionar algunas, son fundamentales.
Éstas, no obstante te resultarán inútiles si te falta lo principal: saber qué es lo que quieres conocer tus potencialidades (gustos, habilidades, aptitudes), valorar tus limitaciones.
Éstos son elementos básicos si quieres alcanzar tus metas y desarrollarte como persona integrada a una comunidad. Pero si todas las personas tienen sueños y proyectos pero algunos no luchan por conseguirlos. Los sueños sólo pueden convertirse en La realidad en la medida en que estemos dispuestos a esforzarnos y a trabajar con perseverancia para conseguirlos.
Decir "quiero esto" equivale a decir "estoy dispuesto a luchar por ello". Por ejemplo, si alguien dice quiero ser futbolista, tiene que entrenar mucho para llegar a serlo. Si está dispuesto a trabajar toma en serio su propósito y no se desanima frente a las adversidades, es muy probable que tenga éxito. Solo él sebe cuánto está dispuesto a hacer por alcanzar su meta.
Lo mismo ocurre con los proyectos. Cada uno de nosotros sabe hasta donde está dispuesto a llegar para alcanzar sus sueños.
A veces incluso se tiene que hacer ciertos sacrificios como renunciar a actividades que nos gustan, levantarse temprano, seguir una disciplina férrea y varios otros.
En todo caso el truco consiste en estudiar, comprometerse, responsabilizarse y ser consecuente con el propósito que nos hemos trazado.
Cristóbal Colón poseía un proyecto, creía y tenía muy claro qué claro lo que quería. Cuando se lanzó a la conquista de su sueño nadie daba por él ni un centavo, pero eso no le importó. Decidió perseverar y tocar todas las puertas hasta que lo logró abrir una. "El que persevera alcanza", dice un buen dicho y Colón es buen ejemplo de ello.
En México tenemos a la escritora Elena Garro y el astronauta Rodolfo Neri Vela, que tampoco se amedrentaron ante las dificultades que enrañaban sus sueños. Perseveraron y lo consiguieron ser y hacer lo que querían.
Frida Kahlo es otro ejemplo de perseverancia. Ella pintó cuadros de singular belleza pese a tener limitaciones físicas. Así como otros compatriotas, hay miles más que han logrado sus propósitos porque se esforzaron en conseguirlos.
buennoooooooooooooooo