La llorona: Es un relato fantástico que habla de una mujer que llora por sus hijos muertos, se registró en México por primera vez, pero se ha extendido por otros países de Latinoamérica. Su lamento característico es “¡ay mis hijos!”.

La escalofriante historia de la llorona:

• En los años previos a la llegada de los españoles a México, se registró un relato donde una mujer lloraba por las noches por los canales de Tenochtitlan, se supone fue un augurio de la destrucción inminente que se cernía sobre el imperio mexica y en general de la sociedad prehispánica a causa de la conquista española.

• Fray Bernardino de Sahagún recoge esta leyenda en su obra “”Historia general de las cosas de la Nueva España” donde describe al espectro como una mujer delgada vestida totalmente de blanco y con el cabello negro identificándola con la diosa azteca Cihuacóatl, protectora de las mujeres muertas en el parto.

• Durante los primeros años de la conquista la gente escuchaba los gritos de dolor y veían a una mujer vagando por el actual zócalo de la ciudad de México, porque ahí se hallaba el templo de los antiguos dioses de Tenochtitlan.

• Ya en los albores de la época colonial, la razón de su llanto se explicó como una decepción amorosa de una joven y hermosa mujer indígena que mantuvo relaciones con un español, de donde nacieron tres hijos pero al desposar a una española adinerada en vez de ella, ahogo a sus tres hijos en un río y luego se suicidó, este acontecimiento digno de la nota roja fue la razón de su penar.

• En las calles de la ciudad de México, de otras ciudades del país, y hasta en el medio rural se ha oído y visto un espectro que se identifica con la llorona.

• Como solo se puede ver de noche, a las personas ebrias se les quita la borrachera y a las personas sobrias se pueden enfermar del susto.

• La mayor parte de testimonios que aseguran haber visto la espectral aparición, coinciden en que a la llorona no se le ven los pies al caminar sino que va flotando por los aires, con su vestido blanco y que es una mujer de excepcional belleza.

• En varios países de Latinoamérica se conocen relatos de la llorona, las razones de su llanto son en su mayoría por decepciones amorosas.

• En todos los relatos aparece el instinto maternal herido por la pérdida de un hijo.