Hacer lo correcto es prioritario, pues la suma de nuestras acciones puede ser benéfica o perjudicial a corto, mediano o largo plazo. Siendo así es bueno saber que mientras hay vida hay posibilidad de esforzarse y dar “batalla” para no ser vencidos por lo incorrecto (cosas/acciones) que después lamentamos, causan daño a los demás o a nosotros mismos. Pero ¿por qué cuesta tanto hacer lo correcto?

¿Qué es hacer lo correcto? Actuar con bondad, fidelidad, honestidad, gratitud, respeto, responsabilidad, colaboración, compasión, tolerancia, etc. en todas las áreas de la vida.

¿Qué es hacer lo incorrecto? Actuar con ingratitud, odio, venganza, irresponsabilidad, deshonestidad, indiferencia, crueldad, insensibilidad, contiendas, etc. en todas las áreas de la vida.

No se trata de dejarse llevar a donde el viento nos arrastre o esperar que de algún modo mágico las cosas fluyan, lo correcto es controlar el timón y el volante de nuestra vida…

¿Por qué es tan difícil hacer lo correcto?

• Por nuestra naturaleza dual. Toda persona tiene en su “chip” instalado ambos lados (el lado bueno y malo). Podría decirse que ahí está el problema, pero en realidad eso no es problema, la verdad es que ahí está el reto de todo ser humano.
• Si nos resulta difícil hacer lo correcto es por la falta de aprender/saber hacer lo que es bueno (lo correcto) y esto se logra con esfuerzo y práctica continua.

Para que no sea tan difícil hacer lo correcto hay que aprender hacer el bien. Haciendo el bien el mal tiende a ir desapareciendo. Mientras le demos preferencia a hacer lo correcto así será, ya que solo uno a la vez puede prevalecer (el bien o el mal) y eso depende de nosotros. La estrategia es aprender/concientizar y hacer cosas buenas. Es mala estrategia combatir solo lo malo sin “grabarse” y actuar en lo que es bueno.

Hacer lo correcto requiere voluntad y esfuerzo, eso es un auténtico triunfador. Hacer lo incorrecto es fácil pero no acumulas ningún mérito para tu vida y solo se empeora más el mundo donde vivimos…

Prácticamente estamos en un campo de batalla, nuestra guerra es no ser vencidos haciendo cosas incorrectas. Hacer lo correcto requiere un gran esfuerzo. Hacer lo incorrecto es hacer lo que se nos venga en gana y si queremos (es egoísmo: yo, yo y solo yo).

No se trata de dejarse llevar a donde el viento nos arrastre o esperar que de algún modo mágico las cosas fluyan, lo correcto es controlar el timón y el volante de nuestra vida. Y esto es posible gracias a que tenemos la posibilidad de elegir entre una cosa u otra, entre una decisión u otra.
Hacer lo correcto requiere voluntad y esfuerzo, eso es un auténtico triunfador. Hacer lo incorrecto es fácil pero no acumulas ningún mérito para tu vida y solo se empeora más el mundo donde vivimos.

Tenemos el poder de decidir en hacer lo correcto o incorrecto, si hacemos lo correcto somos colaboradores para un mejor mundo, y lo contrario también es cierto. Espero que todos sepamos elegir bien.