En la charca de una granja hay algunos patos.
Se pasean tranquilamente por el agua sin ahogarse.
¡Con qué habilidad nadan y se zambullen y cuando salen del agua que graciosos son en su andar!
A Titán, el perro de la casa, le gusta correr tras de los patos.
Le divierte verlos andar tambaleándose, les ladra de cerca para, asustarlos, pero cuando se echan al agua y se zambullen, se queda en la orilla, como un cobarde.
Los patitos de la granja
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