Tanto la buena educación como la mala educación son independientes de nivel social o socioeconómico, cultural, sexo y edad. La realidad es que el fomento y el trabajo en la buena educación depende de todos y principalmente de uno, también de los padres o de los más cercanos a la persona. La buena educación requiere de trabajo y de esfuerzo, pero hay grandes ventajas en lograrlo. Veamos qué significa maleducada y cuáles son las características de una persona mal educada.
Descripción de una persona mal educada
¿Cómo es una persona mal educada?

- Nunca agradece.
- La gente maleducada no saluda cuando debería.
- Se burla de los demás.
- No pone atención cuando debería.
- La persona mal educada en peores casos es grosera y por supuesto sin modales.
- Se sienta en algún lugar donde no le corresponde o no se debe.
- Daña las cosas que son públicas, no respeta lo privado.
- Hace ruido y piensa que los demás deben “aguantarse”.
- Cree que todos están en contra suya y que solo ella está bien y tiene la razón.
- Y muchas cosas similares.
Ejemplos
- Se sienta a comer y no le importa comenzar antes, lo que le interesa es que él coma y ya.
- Le están hablando y esta con su celular y no presta atención.
- Escupe como se le dé la gana sin importarle que no sea el lugar más apropiado para hacerlo.
- Le dices: - espérame un momento voy rápido por “x” cosa - y te contesta: - te espero - pero resulta que se va, y no le importa el esfuerzo que hiciste en venir y regresar lo más rápido posible, aunque le hayas indicado cuanto tiempo te demorabas en ir y regresar.
- Cuando es día del niño, de madres o alguna otra festividad se forma en la fila cuantas veces pueda con tal de que le den un regalo más, sin importarle que a los demás no les toque.
- Etc.
Básicamente la mala educación es sacar a flote algo o demasiado egoísmo interior. Hacer bastante mal lo que uno quiere y como quiere, con poca o sin nada de consideración hacia los demás.
Al ser mal educado solo se obtienen desventajas:
- Difícilmente te aprecian los demás.
- Eres ejemplo pero para lo malo.
- Hay mínimas probabilidades de que logres tus metas y anhelos a la “buena”.
- Y como dice un buen principio: “semejantes con semejante se atraen”, así que no esperes en vano atraer cosas, personas o logros lindos a tu vida.