Ser madre te hace feliz, pero muchas veces se experimentan sensaciones que confunden como tristeza, miedo, angustia.
Estos casos se presentan después del embarazo pues muchas mujeres se sienten tristes, a menudo lloran, se fatigan, se sienten ansiosas y se irritan, pero aun así pueden llevar a cabo sus tareas diarias.
La respuesta física y emocional puede variar de un embarazo a otro en una misma mujer. Sin embargo, lo más común es:
• Gran preocupación por el bienestar del bebé o falta de interés en el niño.
• Pérdida de interés o no disfrutar la vida.
• Fuerte sensación de fracaso o de ineptitud.
• Falta de motivación para hacer las cosas.
• Llanto, sentirse agitada, irritable o ansiosa.
• Aumento exagerado o pérdida del apetito.
• Dificultad para conciliar el sueño o dormir más de lo usual.
• Sentir que no vale la pena vivir; ideas suicidas; temor a hacer daño al bebé.
¿Por qué se presenta?
Hasta ahora las causas exactas se desconocen, lo único que se sabe es que los niveles hormonales cambian durante el embarazo e inmediatamente después del parto, lo que produce cambios químicos en el cerebro y genera depresión.
Otros factores que pueden contribuir son: sentirse agotada después del parto, experimentar que el sueño cambia, falta de descanso, sentirse abrumada con un nuevo bebé a quien cuidar, dudar de la capacidad de ser buena madre, sentirse estresada por los cambios en las rutinas del trabajo y hogar, sensación de pérdida de identidad (quien soy o era antes de tener al bebé), de una figura esbelta, sentirse menos atractiva, con menos tiempo libre y tener que quedarse en casa durante periodos más largos de tiempo.
¿Cómo evitarla?
• Sigue una dieta nutritiva y balanceada.
• Realiza ejercicio.
• Trata hacer caminata de 30 minutos tres veces por semana.
• Disfrutarás más tu paseo si caminas con tu bebé colocado en una carriola.
• Es recomendable tomar una siesta durante el día mientras el bebé duerme.
• Mantén una actitud positiva.
• Cuida de ti misma.
• Maquíllate y péinate, sal de compras y busca distracciones.
• La depresión postparto existe y se le debe poner atención.
• Si es necesario buscar ayuda y consultar a un médico.