Si con lo dicho hasta ahora sospechas estar en esta situación con alguien, verifícalo con los siguientes síntomas:
1. Desesperanza de cambio
Te sientes constantemente agredido o afectado por la otra persona y tienes la creencia de que esta situación es permanente. Piensas que seria imposible establecer con ella una conversación sensata y que nunca podrás aceptarla como es.
2. Hipersensibilidad
Agudiza tus sentidos. Solo pones atención en lo que dice quien te cae mal, estas muy pendiente de revisar que trae puesto, si subió de peso, si se le pasó la mano con la loción, etc. Eso es hipersensibilidad.
3. Es profético
Es un fenómeno humano que pareciera invocar aquello que nos incomoda. La persona que menos quisieras encontrarte hoy es la primera que ves al salir del elevador de tu oficina o en el restaurante al que fuiste a comer con tus amigos, y por si fuera poco, te saluda como si nada, ignorante del estado emocional que es capaz de provocar en ti.
4. Puede ser contagioso
Expresas todo lo que te molesta de alguien con tus amigos o parientes y alguno de ellos, también se siente identificado, y a partir de entonces no puede sino ver todo malo de esa persona.
5. Culpabiliza
El enganchado normalmente hace responsable al otro por lo que ocurre (no consideras que podría ser que tu novio llegue siempre tarde porque hay mucho trafico en su ruta, o que tu mamá ya tuvo una mala experiencia quiere asegurarse de que tu te cuides).