Se entiende por flojera a la situación de no sentir ganas de realizar actividades que conlleven esfuerzo físico o intelectual. La flojera, también, es conocida comúnmente como hueva, pereza, haraganería…etc. Es probable que todos en algún momento dado hayamos experimentado flojera, pero en teoría eso debería ser pasajero, pero en algunas personas se queda, ya no como algo temporal, sino como un estilo de vida.
Cuando damos paso a este estilo de vida, se requiere mucha fuerza de voluntad para salir de ella, ya que de lo contrario, las palabras que te hablen para hacer notar tu “problema” están de más. No obstante, no está de más proveer algunas posibles soluciones para deshacerse de la flojera.
No quiero ser flojo ¿Cómo vencer la flojera?
• Reconocer que tiene un problema y decidirse a salir de él.
• Ponerse un objetivo real.
• Poner manos a la obra.
• Para sacudirse la flojera es necesario descartar comentarios negativos.
• Autodisciplinarse.
• Dormir bien y evitar desvelarse.
• Alimentarse sanamente.
• Levantarse temprano y lavarse la cara o bañarse.
• Evitar las distracciones ociosas como redes sociales, internet (ver cosas que no ayudan en nada), el cable, exceso de videojuegos…
• Para acabar con la flojera debes evitar vicios.
No es sencillo acabar con la flojera, pero con fuerza de voluntad y ganas todo se puede. Habla con la familia y expón tu decisión de salir adelante, pide su apoyo y comprensión. De ser posible, pide disculpa por tu actitud anterior, pues esto reforzara, tanto en ti como en ellos, que va en serio. No te desanimes si en un principio las cosas son un poco adversas, recuerda “después de la lluvia viene la calma”.
Decídete.