Aferrarse al pasado se vuelve molesto cuando ese pasado se vuelve impositivo del presente, es decir todos los actos presentes se convierten en una remembranza del pasado a fin de solucionarlo, revivirlo y no dejarlos. En cambio, cuando se controla como vivencias pasadas y superadas no representa ningún problema. Veamos algunos consejos de como dejar de pensar en el pasado y vivir el presente.
"La vida es un constante mirar hacia el porvenir basado en la experiencia que da los aciertos y errores del pasado, no del mantenerlo como si fuera un presente…"
Consejos para dejar el pasado atrás:
- Considerar que las circunstancias no son iguales.
- Valorar por lo que tanto se ha trabajado y que actualmente se goza.
- Dejar de frecuentar o mudarse de algún lugar de malos recuerdos.
- Borrar fotos del celular o tirar las fotografías físicas que existan.
- Decidirse a no dar marcha atrás en los recuerdos.
- Platicar con personas de confianza acerca de lo que pasa.
- Buscar ayuda profesional para tratar esa obsesión por cosas de otro tiempo.
- …etc.
¿Por qué es malo vivir en el pasado?
- Es incómodo para las personas que actualmente forman parte de su vida.
- Es una distracción constante.
- Provoca desanimo, producto de la nostalgia.
- Provoca conflictos internos que de no ser atendidos pueden provocar culpabilidad.
- Ocupa sus fuerzas creativas en tratar de solucionar algo que ya no tiene remedio.
- Puede provocar tristeza constante y que puede derivar en depresión, que a su vez hace que pierda sentido la vida, ya no “le echamos ganas en nada”.
El pasado es parte de la vida presente
No tiene por qué sentirse afectado por algo que se decidió en otro tiempo debido a las circunstancias, madurez personal y lugares distintos a los actuales. La vida es un constante mirar hacia el porvenir basado en la experiencia que da los aciertos y errores del pasado, no del mantenerlo como si fuera un presente.